
Comúnmente la xilacina se utiliza de forma clínica como sedante veterinario, no obstante, en la actualidad, dicha sustancia en conjunto con el fentanilo, ha sido empleada como “una nueva droga” la cual aumenta las posibilidades de tener una sobredosis, además de ocasionar daños neurológicos, y, por consiguiente, tener repercusiones cognitivas. Esta problemática no solo afecta a la persona consumidora, sino que también impacta en el entorno social, a día de hoy, Estados Unidos no es el único afectado, en nuestro país se han encontrado hallazgos de dicha adulteración de sustancias lo cual indica un posible incremento en la prevalencia.
También puede {advancedSearchLink} para este artículo.